viernes, 20 de mayo de 2011

La vecinita tiene antojo...



La vida moderna y urbana nos ha regalado millones de edificios y materiales de construcción cada vez más sencillos que hacen que las paredes sean delgadas y se pueda oír fácilmente lo que sucede del otro lado. Así como en todo edificio hay un portero particular, una vecina chusma, un viejo que no saluda, también hay una vecina gritona que pone en jaque a todo el edificio cuando tiembla su cama o la del señor al que visita.
Cuando suceden estas cosas, uno nunca sabe si la señorita es una histérica de esas que les gusta hacerse ver (o escuchar) a donde quiera que vayan, o si el señor hace algo descomunal o si le gusta expresarse libremente.
Hay que reconocer que es extremadamente difícil y aburrido el sexo callado, pero también es insoportable escuchar a minas gritando: "dame más", "que burro", jajja. O sea, el gemidito es lindo y es altamente motivador, el propio y el ajeno, excepto que estés cenando con tu mamá y tus vecinitos están dale que dale y ni los gritos de Tinelli en el televisor alcanzan para taparlos.
En un edificio donde vivía hace unos años había una mina que todos los días a la misma hora empezaba con el concierto de gemidos y grititos, no sabemos si trabajaba en el depto. o el novio venía siempre a la tarde. Le pusieron un cartel en la puerta: querida, si no dejas de emitir ruidos molestos, te denunciamos.
Seguramente tenés una historia de gritonas vivida en carne propia o ajena para contar.
(Gracias al muso inspirador de este post)

17 comentarios:

  1. Tengo, sí. Por suerte (para los demás, capaz no tanto para ella) últimamente está tranquila, no se la siente. Pero una vez unos pibes terminaron felicitando y aplaudiendo al flaco porque ya era una exageración, jajaja. Para míla hija de puta lo hace a propósito para darnos envidia a las que estamos solas como locas malas.
    Y a mí una vez me gritaron "Ay callate nena!". Una tiene su pasado ;)

    ResponderEliminar
  2. un poco rara: sí, para mi muchas veces lo hacen a propósito. y bueno, sí, a todas nos habrán escuchado alguna vez, el tema es la "compartida" del ascensor con los vecinos al otro día...jaja.

    ResponderEliminar
  3. Vivo en una zona de casas de grandes terrenos y habitada, en su mayoría, por gente mayor. Asi que no tengo ninguna experiencia de escuchar a vecinos garchando. Una vez escuché a mi tio y a su novia y me dieron ganas de entrar con una ametralladora, pero de forro para cagarles la noche, no para matarlos :P
    Bueno, me cae mal la novia de mi tio, asi que la mataría :P

    ResponderEliminar
  4. Me pasó, en unas vacaciones en una hostería con mi ex. Pero no fue una mina; el que hacía quilombo era un burro de un corral al lado de las cabañas...Todos los días, mañana, tarde y noche!!
    Pero en mi época de telos,recuerdo que era habitual soprenderse por el volumen de los orgasmos.
    Sólo he tenido una pareja "gritona", pero cuando venía a casa solamente. En su depto en cambio no:"por los vecinos". No sé si llamarla hipócrita o considerada.

    ResponderEliminar
  5. dark: bueno, los viejos también garchan...más espaciado, pero garchan.
    Mas allá de que no te banques a la novia de tu tío, es muy incomodo escuchar garchar a un pariente. Son momentos donde te querés ir corriendo a donde sea. Una vez escuché a mi mamá y casi me muero.

    Ato: jaja, bueno, el burro no sabe de decoro ni de que vivía en un lugar turístico.
    Y en los telos sí, en la mayoría se escucha todo. Lo de tu amiga gritona en casas ajenas, jaja,muy gracioso.

    ResponderEliminar
  6. una ves, estabamos con el trencito en esos momentos de previa y se incorpora,cierra las ventanas, pone musica y lomire como diciendole(qselodije) q haces? sos un corta mambo, aloq muy dulcemente respondio mientras se posaba sobre mi: amor gritas como si te estuviera matando, y si te tapo la boca(q lo hizo tb a veces)te voy a matar. Jamas me habia dado cuenta,y no se cuanto habre guitado,un papelon, despeus de eso, me controlo, la joda esq mi habitacion da a la calle.
    de mas esta decir q realmente nunca me di cuenta, y supongoq debe ser melesto,Igual en un telo jamas me escucharon.
    Besos

    ResponderEliminar
  7. Yo tengo arriba un pibe que vive solo. De vez en cuando se aparece con una mina que es una orquesta sinfónica.
    En verano es todo un acontecimiento.
    Y no son rapiditos más bien todo lo contrario.
    Algunos lo quieren tapar con el volumen de la TV lo cual no hace más que agrandar el espectáculo.

    ResponderEliminar
  8. las minas que gritan todo el tiempo, si no están acabando, en general simulan calentura. Y suelen ser insufribles fuera de la cama también. Y encima ahora me entero de que garchan para que las escuchen...otras minas(?¿); se visten para otras minas, se maquillan para otras minas, garchan para otras minas; porqué no se dejan de joder y se hacen tortas. Graben un video y repártanlo con la liquidación de expensas. Y todos contentos.

    ResponderEliminar
  9. La mejor que tendría para contar pierde toda la gracia si la cuento acá, porque el chiste está en el final. Es como esos que preguntan "conocés el chiste del tipo que cree que la banana....?" y te cuentan el final en la pregunta.
    Otra memorable fue en Miramar, un veraneo. Los de al lado eran una pareja - ella muy gata, el tipo medio rústico y el hijo de ella - que tenían horarios muy diferentes de los nuestros y garchaban a lo bestia. Dos de la mañana, seis, siesta... lo que fuera. Y ella no paraba de hablar y se escuchaba absolutamente todo. Hasta que una mañana después del garche el tipo se fue al comedor y ella sola en la pieza se empezó a ahogar mal (a ese nivel se escuchaba) hasta que casi se muere. Lo escuchábamos al tipo pedirle al nene que buscara en la cartera de la mina la credencial de la Obra Social y buscara un teléfono público para llamarlos, y el pibe no sabía ni qué era una cartera. Terminé llamando yo una ambulancia y después le fui a tocar timbre para avisarle. Un horror, se la llevaron hecha percha y nosotros ese día nos volvimos a Bs As. No sé si se salvó...
    La más actual es la amiguita del flaco del primero, que me valió el título de muso...

    ResponderEliminar
  10. trencita: es cierto que a veces cuando estamos en vivo y en directo no sabemos cuales son los decibles de los gritos. Dentro de todo es mejor que sea a la calle la ventana, donde a lo sumo te escuchan los ocasionales transeuntes.

    Dany: ja, es cierto lo del televisor, salvando las distancias es lo mismo que los que tiran desodorante de ambiente para tapar el olor-

    Pablo: la histeria hace que quieran que todos y todas te vean o te escuchen.
    el gemidito es una expresión de placer, mas allá de que estés acabando.

    Oscar: es obvio que ahora te iba a pedir que cuentes el chiste del tipo que cree que la banana....??
    pero la mina del hotel ese no se ahogó por los gemidos, le habrá pasado otra cosa...

    ResponderEliminar
  11. Vivo en el tercer piso y el edificio fue construido con materiales de dudosa calidad entonces los ruidos de toda clase se escuchan claritos y fuertes.
    En el segundo vivía (se mudó hace un año) una gritona que cada vez que garchaba parecía que se la llevaba el diablo. También, cada vez que hablaba por teléfono se escuchaba todo...
    Ahora escucho los llantos del bebé del primero y la música rosa del vecino del funcional (aunque es gay así que prefiero eso a escuchar gritos de placer!).
    Besos!!

    ResponderEliminar
  12. Es dificil el tema de tener sexo ensilencio,a mi se me complica,por eso muy pocas veces,lo hice en un a casa,preferiblemente en telos,ya que ahi es algo que no llama la atenciòn.
    Por esta razòn,me solidarizo con los gritones y gritonas.

    ResponderEliminar
  13. A mi me recalienta !

    ResponderEliminar
  14. "que vas a volver si nuncate fuiste"...apuntate por Doc 9, que hay regresado...abrazo de gol

    ResponderEliminar
  15. tendría que buscar en mi blog... pero alguna vez conté una anécdota de una muchacha gritona con la que compartí unas noches.
    Resulta que habíamos ido a mi departamento una madrugada de domingo... llegamos a mi cuarto... abrí un poco la ventana -ya que estábamos en pleno enero y no tenía Aire- y en medio de la fanfarria, comenzó a gritar locamente... mi nombre.
    Vale comentar que mi habitación daba justo al pulmón del edificio, y mi nombre retumbó por las paredes.
    Luego de eso, creo que no hubo vecino que no me haya saludado con una sonrisa.

    ResponderEliminar
  16. etienne: sí, los edificios modernos muchos son de dudosa calidad, no aptos para gente susceptible de escuchar a sus vecinos. Ah sí, y escuchar las charlas telefonicas es un clásico...y uno cree que está en una conversación privada, jaja

    Renacida: es cierto es dificil, en los telos hay impunidad. En la casa de los parientes hay prohibición.

    anonimo: y sí, si no es algo muy teatral que suene artificial y si uno no esta en la casa mirando tele con la abuela o con los hijos, a mi te diría que también. Todo depende del contexto del que escucha.

    waitman:ah no! que griten tu nombre ya es demasiado!

    ResponderEliminar

Opiná aquí