Sexo y política

Parece que el poder erotiza,de otra manera no se entenderían algunas cuestiones que involucran al sexo y al poder.
Hay hombres que piensan con el pito y son los peores, porque arriesgan su trabajo, su carrera, su familia por un ratito de placer. Y el poder y la política no te eximen de este defecto, y esto lo vimos claramente hace unos años con Bill Clinton (que como ven en la foto ahora también tiene un perrito muy cariñoso) cuando sucumbió ante el pete que le proponía Mónica Lewinsky. La chica (sin ánimo de desmerecerla) no era la oportunidad de su vida para Clinton, pero cuando gobierna el pito...el cerebro se queda sin decisión y sino pregúntele a Berlusconi.
Es sabido que todo hombre en posición de poder ya sea económico, político, o mediático, tiene una lista de mujeres que quieren estar con él. En la Argentina, el caso más emblemático es el de Menem, que siendo feo como pocos, además de bruto y corrupto, logró conquistar a muchas mujeres exhuberantes que se morían por estar con él. Incluso, dicen que para la primera presidencia influyó mucho el voto de las mujeres, que lo veían "seductor"...
Y no es el único político que apeló al "voto por carisma" o "voto por mi facha". ¿Se acuerdan de Massacessi, el del sur? Ahora está desaparecido que yo sepa, pero en su momento, sin ser muy lindo ganaba votos femeninos con sus ojos celestes. Y ni hablar de Francisco De Narváez, que a su falta de ideas y compromiso la suple con su cara de bueno (?) y su sonrisa. Para la última campaña legislativa, De Narvéz hizo un spot televisivo para el día de la mujer, donde les hablaba casi coloquialmente a ellas. Y además, la campaña gráfica apeló a sacarse el traje, y hacerlo "más doméstico", así lo vimos con remeritas de cuello redondo y con un guiño claro hacia el electorado femenino.
Y Macri parece que se casó con la mujer que viene de una familia que explota gente en talleres clandestinos, pero nada de eso importa, porque ellos son la cara de marcas re top de ropa para adultos y niños. Pero vieron que hasta hace un tiempo Macri se hacía un poco el galán, aunque supongo que el pedido de juicio oral y el haber estado cerca de la asfixia por tragarse un bigote postizo en su propia fiesta de casamiento, le sacaron las ganas de hacerse el lindo y ahora se luce con unos ridículos sombreritos pilusos.
Pero el tema del poder y la política siento que es diferente en el caso de las mujeres. Porque así como los hombres en posiciones altas de poder erotizan y atraen, en el caso de las mujeres en esas posiciones es como que se convierten en intocables. ¿Alguien se animaría a tirarse un lance con Cristina? y ni hablar con Carrió, pero en ese caso sería por otros motivos.